La
química, como ya está dicho, se ocupa del estudio de la materia y de sus
propiedades, ya sean éstas cualitativas o cuantitativas. Los materiales en
cualquier estado, poseen un conjunto de propiedades que los diferencian, a
saber: los materiales sólidos tienen forma y volumen propio, los líquidos se
amoldan a la forma del recipiente que los contiene; los gases no tienen forma
ni volumen propios, ellos ocupan el espacio del recipiente que los contiene, al
igual que también adoptan la forma del mismo.
Por otra parte los alimentos que consumimos (carne, leche, frutas y otros) son producto de
reacciones químicas complejas. En la naturaleza, estas reacciones se
efectúan diariamente en los organismos. Un ejemplo es la fotosíntesis. A
través de ella, las plantas sintetizan sacáridos (familia de compuestos
que incluyen el azúcar) que son almacenados en órganos especializados,
como las frutas que comemos (ahora sabes por qué las manzanas y las
peras son dulces). Y así podemos seguir enumerando muchas otras
reacciones en las cuales la química se hace presente en nuestras vidas.